¿Cómo
preparar una pechuga de pollo o pavo para no aburrirnos haciéndola siempre a la
plancha?
Para
preparar filetes de pechuga de pollo o pavo tenemos que tener en cuenta los
ingredientes que tenemos a disposición en esa comida, además de los que podremos
utilizar a nuestro gusto.
Por
un lado, hemos de contar con las verduras que tenemos previstas para ese día en
la comida: calabacín, tomate, cebolla o puerro, espinacas, brócoli, etc., y por
otro lado contamos siempre con ajo y cebolla deshidratada, perejil y resto de
hierbas que nos gusten, así como especias. En ocasiones contamos con fruta y
para el día disponemos de 20 gr. de aceite, por lo que lo utilizaremos con
cuidado.
Pues
con todo lo anterior podemos cocinar nuestra pechuga de pollo o pavo de
distintas maneras:
Rollitos
de pollo con manzana: Si disponemos de manzana en el postre, parte de ella la
podemos cortar en tiras finas. Salpimentamos el filete (es mejor hacer varios
filetes muy finos que uno grueso) y lo rellenamos con la manzana haciendo unos
rollitos que se pinchan con un palillo. Se pincela con aceite y se hacen en el
microondas o en el horno. Para servir se puede espolvorear pimentón y acompañar
del resto de ingredientes.
Otra
manera de cocinarlo muy sencilla consiste en machacar en un mortero un diente
de ajo, perejil picado (a ser posible fresco) y tomillo. Cuando está todo
mezclado se añade un poquito de aceite y si se desea, unas gotas de zumo de limón.
Se pincela el pollo con esta mezcla y se deja reposar. A la hora de hacerlos se
pone el punto de sal y se hace a la plancha o al horno. Se acompaña del resto
de ingredientes del menú.
Podemos
coger la pechuga de pollo y hacerla en tiras finas. Se pincela la sartén con
algo de aceite y se hacen las tiras de pechuga añadiéndolas curry. Es una
manera rápidade cocinarlo y con
distinto sabor. Se acompañará del resto de alimentos del menú.
Cogemos
todas las verduras indicadas en el menú y las picamos. En una sartén se pone un
diente de ajo picado y se va dorando en un poco de aceite. Se añaden las
verduras y una vez rehogadas, se añade el filete de pollo en tacos previamente
salpimentado. Una vez que todo está mezclado y el pollo va cogiendo color, añadimos
zumo de tomate, cúrcuma y unas hojitas de perejil y dejamos hacer hasta que la
verdura esté en su punto y el pollo bien hecho.
También
podemos cortar el pollo en tacos y en un recipiente pincelado de aceite,
ponemos dientes de ajo enteros con un corte en la mitad, lo rehogamos con los
tacos de pollo. Luego añadimos perejil, tomillo, sal y el zumo de un limón y lo
dejamos hacer tapado y a fuego no muy fuerte.
Otra
forma sencilla de comer la pechuga de pollo es hacerla a la plancha e incluirla
en trocitos pequeños en la ensalada con el resto de ingredientes disponibles
(tomate, lechuga, cebolla, pepino) y a ser posible con la fruta (manzana) si
disponemos de ella como postre en esa comida.
Esta
receta requiere calabacín y cebolla. En la cazuela se pone un poquito de aceite
y ajos enteros con piel, la cebolla en juliana y el calabacín en rodajas finas.
se deja dorar todo y se le da la vuelta. Cuando está bien pochado se pone
encima el filete con sal, orégano, romero y perejil. Una vez hechos por un lado
se da la vuelta con las verduras incluidas y se deja hacer.
Espero
que os sirva de ayuda para hacer nuestra comida algo más divertida y agradable
al paladar.
¿Qué impacto tienen los kilos de más en tus relaciones sexuales?
El exceso de peso repercute en múltiples aspectos que afectan al deseo y al placer
El exceso de peso afecta a nuestra vida cotidiana de muchas maneras, también en el aspecto sexual (supawat bursuk / Getty Images/iStockphoto)
Últimamente me estoy dando cuenta que estoy subiendo mucho de peso. Por problemas laborales, sufro de ansiedad y me está generando un malestar muy grande. Lo que más estoy notando son cambios en el sexo. Me han diagnosticado obesidad, ¿cómo me puede estar influyendo? Muchas gracias.
La obesidad es un trastorno que cada vez afecta a más personas en las sociedades occidentales. Atlas
El exceso de peso afecta a nuestra vida de manera importante en diversos aspectos, también en lo sexual. Tiene consecuencias en nuestra salud, como el aumento de los niveles de azúcar y colesterol, las dificultades para respirar, la apnea del sueño o los problemas arteriales, entre otros. Todo ello, sin tener en consideración los problemas emocionales que a menudo lleva consigo, como los relacionados con la pérdida de autoestima.
Consecuencias del exceso de peso
1. Actividad hormonal
Tanto en hombres como en mujeres, la obesidad produce una disminución de los niveles de testosterona, una hormona encargada, entre otras cosas, de regular nuestro deseo sexual. Por lo tanto, con el exceso de peso aparecen problemas de falta de deseo que lógicamente afecta de forma determinante en la vida íntima de la pareja.
2. Circulación sanguínea
En los hombres, el exceso de peso y el sedentarismo conducen a largo plazo a problemas de circulación y condiciones cardíacas que afectan al flujo sanguíneo, haciendo que éste sea más dificultoso y, por tanto, se traduzca en problemas para tener y mantener erecciones. Por tanto, la obesidad aumenta las probabilidades de padecer disfunción eréctil.
En las mujeres, estos problemas de circulación sanguínea afectan al placer sexual, ya que el flujo de sangre que llega al clítoris es menor de lo necesario para poder tener las sensaciones idóneas para disfrutar y quizás para llegar al orgasmo.
3. Reproducción
A nivel reproductivo la obesidad se ha asociado con el aumento de la probabilidad de padecer ovarios poliquísticos, lo que dificulta el embarazo. Y en el caso de los hombres, los espermatozoides son mucho más lentos, aspecto que de nuevo afecta a la reproducción.
4. Actividad sexual
Todos sabemos que la obesidad hace que realizar actividades físicas sea muchas veces extenuante, y no hay que olvidar que el sexo es un completo ejercicio cardiovascular. Por ende, suele ser complicado tener encuentros sexuales largos, pasionales y cómodos, así como es complicado llevar a cabo determinadas posturas que producen más esfuerzo o incomodidad.
Hay estudios que concluyen que, en muchas ocasiones las personas que sufren de sobrepeso tienden a tener una vida sexual rutinaria y poco satisfactoria.
5. Autoestima
Los factores psicológicos y sociales juegan un papel importante en la aceptación del cuerpo de cada uno y, determinan el sentirnos más o menos seguros. La autoestima es una clave fundamental en el desarrollo de la sexualidad.
Hay estudios que aseguran que las personas obesas se sienten más acomplejadas e insatisfechas con su imagen, lo que produce cierta inhibición para mostrarse a nivel sexual y no poder disfrutar al cien por cien de las relaciones.
Algunas mujeres y hombres tienen complejos sexuales derivados de su exceso de peso (belovodchenko / Getty Images/iStockphoto)
Tratamiento y consejos
El único tratamiento posible es ir al médico como primer paso, y buscar una ayuda para controlar el peso, pudiendo así disfrutar de la sexualidad en la máxima expresión. De todas formas, los tratamientos psicológicos pueden ayudar a hacer una aceptación de uno mismo, buscar las prácticas sexuales que se adapten a la obesidad y lograr salir de la rutina y que ambos miembros de la pareja se sientan satisfechos.
Es importante aclarar que obesidad no es lo mismo que sobrepeso. Este último, por sí mismo, no influye en la sexualidad, más allá del problema que presente para la persona su imagen corporal.
Así como la información proporcionada no se presenta en toda persona obesa, simplemente se exponen los casos más comunes y probables, según los estudios realizados.